La mandataria dispuso un gigantesco operativo de seguridad con 136.000 policías para evitar desbordes en la nueva manifestación de este miércoles en la que los convocantes exigen su renuncia y el llamado a nuevas elecciones.
La mandataria dispuso un gigantesco operativo de seguridad con 136.000 policías para evitar desbordes en la nueva manifestación de este miércoles en la que los convocantes exigen su renuncia y el llamado a nuevas elecciones.